Sono stanco di dirlo, e sopratutto sono stanco di non esere mai presso sul serio, forse ormai viviamo in una società dove c'é così tanta futilità che qualsiasi cosa, anche la più sincera, lo diventa a sua volta.
Las muñecas que no se peinan, serán feas, muy feas, la unica muñeca que nunca será fea es mi muñeca MIroslava, tú, amorcito, eres siempre bella, bella por siempre y cada día aún más y más, sigue así, quizas tú, me diras como se peinan las muñecas...