¿Entonces te gustan mis ojos?

Si yo pudiese decir
lo que me gusta...
Si en mi existiese
el vocablo justo...

Escogería el instante
exacto en que me miras
y no, no son tu ojos,
es tu silencio...

Es esa leve caricia,
casi perfecta...
ese momento
en que te siento...

Sentir ese aroma
que emana tu piel...
entre los dedos,
y no dejar de verte...

Sentir tu sencillez,
perfecta, intencional,
y el temblor de tus manos
en las mías...

Me gusta que no logras
esconder lo que deseas,
que es lo que yo siento
atándome las venas...

Sentir que me haces falta
y no poder decirlo,
con la congoja en el pecho,
y agua en las pupilas...

Te siento allí, esperando,
que todo sea un sueño
del cual en un momento
despertar sin riesgo...

Si mi gustan tu ojos,
ya lo sabes de cierto,
aquéllo que no sabes
es que me gusta todo...

Observo atentamente
cada verso de tu cuerpo,
cada guiño de tus ojos
y me encanta lo que veo...

Me gusta que me digas
que es bello amarte así,
y que niegues al tiempo
que no es solo un momento...

Me gustas en silencio,
y si no estas me haces falta,
y observo el sueño y niego
lo mucho que me gustas...

Y aun así, me gustas,
y mas lo niego al cielo
mas aun me gustas
mas aun que antes...

Te veo y no te veo,
eres dafnia inerte
entre mis rimas
sueltas...