I giochi (Los juegos ) Per il giorno della mamma 2019

I Giochi

meraviglia quieta
nello sguardo di acqua e sale,
di freddo verde e nenie di luna.
e più in qua e più in là!
rimase un palpito di tepore tenace,
come di cuccioli addormentati,
e i girotondi e le statuine
e gira e rigira e adesso sei a Milano!
E giravolte e viaggi e aeroplanini e capriole e volteggi  e seme calpestato.
E il seme fruttifica nel trascorrere, luce che ride,
nel gioco, nei girotondi, nei cerchi, n.
E giri e rigiri, e carezze, risate che vennero al tuo
viso e gioiose si accucciarono nelle tue dita forti
e viaggiarono e sbocciarono nelle mie mani
dove s’impressero i nomi, l’allegria, le leggende.
E furono voci e parole che si scrissero
nei semi dell’anima
e rimasero lì, blande, bianche.
E furono nostalgie, pane di ricordi, calamita d’illusioni, forze.
Tornano a essere parole d’emozione,
voci vivide di colori, di suoni tintinnanti.
Limpide fluiscono in ruscelli argentini, in
stelle e fiocchi e grembiuli bianchi e furono
i quaderni nel suolo prodigo.


Los juegos

asombro quieto
en la mirada de agua y sal,
de frío verde y luna arrulladora
¡y màs acà y màs allà!
Se quedó un pálpito de tibieza tenaz
como de cachorros acurrucados,
¡ Y la ronda y la estatua!
¡ Y gira y gira, y ahora estás en Milàn!
Y rondas y viajes y avioncitos y vueltas y vaivenes y Semilla pisada.
La semilla fructifica en el transcurrir, gota de luz che ríe,
en el juego y las rondaS, e y en las vueltas de los viajes.
Y otras vueltas y giros y carámbolas y vuelos y manos recias
y risas y caricias que alborozadas se[cobijaron en tus dedos y viajaron
y volaron y brotaron en mis manos
donde se imprimieron los nombres, la alegría de los juegos.
Fueron voces y palabras que se asentaron en semillas de alma
y se quedaron allí, blandas, blancas
y fueron pan de recuerdos,imàn de ilusiones, fuerza.
Vuelven a ser de nuevo palabras de emociones,
voces vívidas de colores y sonidos,
repiqueteantes fluyen en rocío de oro, en
en estrellas y moños, delantales blancos y
cuadernos en el suelo pródigo.

Francesca  Lo Bue